Carta de la directora


En 2013 comencé a trabajar con personas sin hogar como trabajadora social. De ese primer día, jamás olvidaré la mirada de una mujer a la que atendí nada más llegar. Acababa de perder su casa y era la primera noche que tenía que dormir en la calle. Su mirada de terror, tristeza, angustia, derrota… me dijo tanto, que ahí comprendí, que perder el hogar, es de las cosas más horribles y dolorosas que pueden sucederle a una persona. Si para un hombre es duro, para una mujer es muchísimo peor; son mucho más vulnerables, sufren una doble exclusión, el ser mujer y el vivir en la calle. Además, la mayoría son víctimas de violencia machista.

Por este motivo, propuse abordar desde una perspectiva de género esta problemática, y que mejor manera que a través de mi pasión, el teatro. Al principio nadie apostaba por esta locura de utilizar el teatro como motor de cambio, como herramienta terapéutica. Pero muy pronto empezaron a verse los resultados, con cambios muy notorios y beneficiosos para las 47 mujeres que han participado en el proyecto.

El proyecto comenzó sin grandes pretensiones, pero poco a poco fue creciendo y fuimos creando propuestas pequeñitas nacidas desde la creación colectiva. Con nuestras creaciones empezamos a apreciar, que además de aliviar su dolor y sanar, también llegábamos al gran público, al cual conseguíamos modificar. El secreto de todo ello es, que los textos salen del alma y se trabaja desde la verdad.

Para mí, estos 7 años han sido un regalo del universo que quiero compartir con el mayor número de personas. Por este motivo y por el compromiso y la obligación moral que siento de dar respuesta a una demanda constante de todas ellas, que su voz sea escuchada, que se las vea, que existen, decido embarcarme en esta aventura. Necesito que las conozcáis y hacer visible la realidad que sufren las mujeres sin hogar y que es tan desconocida para gran parte de la sociedad.

Para finalizar, decir que se trata de un documental inédito, que desborda actualidad. Una historia singular, emotiva y mágica, que convierte este film en indispensable y necesario.